Ayer, 26 de septiembre, se presentó en el Corte Inglés de Portal de l’Àngel el libro ¿La prensa apuntilló a la tauromaquia en Cataluña? La Vanguardia y El Periódico de Catalunya, de José Ignacio Castelló. 

La sala Ámbito Cultural se llenó por completo -había gente de pie- para presenciar un acto taurino cinco años y un día después de la última corrida en Barcelona. Salvador Boix, en su intervención, quiso rendir homenaje a todos los críticos taurinos de Catalunya por el mérito de su trabajo entre los que destacó a su referente Mariano de la Cruz, Soto Viñolo, Santainés, Ángel Cebrián, Antoni González y a Paco March entre otros. Boix se mostró un tanto pesimista en cuanto a la vuelta de los toros a La Monumental, pese al inminente fallo del Tribunal Constitucional, supuestamente, a favor de las corridas. Puso en duda la implicación de la familia Balañá (exceptuando a Balañá Forts) para programar algún supuesto festejo después de una posible sentencia favorable ya que podría verse afectado su gran negocio de cines y teatros.

Por su parte, Paco March animó a los jóvenes a ser críticos con el poder y a rebelarse contra él, pues en su opinión tanto la prohibición de los toros como el trato, o no trato, de la prensa a la tauromaquia no deja de ser una cuestión de poder. March tampoco quiso olvidarse del impacto que suponía la presencia de José Tomás en Barcelona, capaz hasta de ocupar portadas en La Vanguardia en el día de La Mercè.

El último turno fue para José Ignacio Castellón, el autor del libro. El libro, realizado a partir de su tesis doctoral presentada en Madrid hace dos años, es un estudio del trato de la prensa a la tauromaquia entre los años 2004, cuando Barcelona se declara ciudad antitaurina, y 2010, cuando el Parlament prohíbe los toros en Catalunya. Castellón notó que la información taurina iba desplazándose a páginas menos relevantes de los periódicos y que se iban reduciendo el número de publicaciones taurinas hasta el punto de no informar de la temporada en La Monumental.