Estamos en pleno San Isidro y aquellos que vemos la feria por televisión solo pensamos en que los comunicadores de ahora hacen bueno a Molés. Son tan malos y nefastos para la tauromaquia que entre todos no hacen uno.
A los David Casas, Germán Estela y compañía solo se les puede llamar comunicadores. Comunicadores de una tauromaquia de facilidad, orejas y felicidad. Critican al que mantiene el espectáculo y al que los mantiene a ellos, no olvidemos que hablamos de un canal de pago que es sustentado por los aficionados. El aficionado se cansa de escuchar las sandeces que dice Maxi Pérez, datos irrelevantes que cualquiera puede encontrar por Google sin mayor dificultad. O escuchar a Emilio Muñoz criticar día sí y día también el trapío del toro de Madrid aunque luego guarde silencio con el nuevo toro de Sevilla. O sus comentarios a ciertas ganaderías, y lo que es peor, criticar a esas ganaderías con las que nunca se puso delante y además se siente orgulloso de decirlo. Por si fuera poco, lleva una feria de celebración constante de bajonazos y estocadas defectuosas. ¡No tiene vergüenza torera!
También hay que hablar de la falta de respeto a los profesionales todas las tardes. Antes y durante el festejo. El antes preguntando las típicas frases, ¿pues que quieren que te digan que están cagados o que hoy no lo ven claro? Durante es justo después de lidiar al toro, se ponen hablar y les da igual que se asome el pañuelo blanco o se encuentre el toro en el ruedo. Qué falta de respeto tanto de ellos como de los toreros que les siguen la conversación. Y no solo eso, también cuando la gente está aplaudiendo o el aguacil con la oreja esperándole y ellos siguen preguntando y preguntando.
Para terminar, la novedad de este año. Criticar al aficionado todas las tardes, pero no a todos los que están en el tendido sino solo a un sector de aficionado. Además lo critican por aplaudir o protestar. Solo depende si aplauden o protestan al que ellos les gusta o lleva la tauromaquia a la facilidad. Solo hay que ver la leña que le han dado a Dolores Aguirre por una corrida con la que nadie se aburrió. Con otras corridas están todos aburridos menos el que vende las pipas, que es el más feliz.
Así estamos de jodidos los aficionados. Con Molés, que mira que era dañino, ya jubilado y eso que el año pasado nos prometió el Netflix taurino, pero estamos en Junio y no hemos vuelto a tener noticias de Taurocast, ese canal del aficionado pero que te mezclaba las ferias de Vic, Ceret con la de Segovia.
Esto es lo que tenemos si queremos ver algún pitón por televisión, así que no queda otra que darle bajo al volumen de la televisión.
Sr.Bravo: Creo es Vd. demasiado severo en su comentario. Considero que lo importante es que sigan retransmitiendo espectáculos taurinos, aceptando las reales o supuestas carencias, que en gran parte no son más que los particulares puntos de vista de cada comentarista. Si Vd. acude a la plaza en persona, le ocurrirá lo mismo. Hay infinidad de opiniones y puntos de vista. Véase la vuelta al ruedo del toro de Chacón, los pitos a destiempo y sin motivo, la protesta a algunos toros con trapío, etc., etc. Un saludo muy taurino.
Yo pienso que nacen lo que pueden ,ni tanto ni tan poco,es que como Moles difícilmente aya otro que lo iguale la verdad es que se echa mucho de menos, es lo que ay un saludo.