Después de unos días de incertidumbre, el novillero Abel Robles ha confirmado una de las mejores noticias posibles en este final de temporada: podrá volver a torear.
Así se lo han confirmado los doctores tras el resultado del último estudio neurológico que fue conocido ayer viernes 5 de octubre. El novillero de Olot deberá cumplir un período de rehabilitación de 3 meses para recuperarse del ictus cerebral sufrido el pasado 13 de septiembre. Durante estos meses, no podrá torear y deberá tomar una medicación muy fuerte, parecida al Sintrom, para evitar coágulos.
En otra de las múltiples pruebas se le detectó una anomalía en el corazón de la que fue intervenido con éxito la semana pasada. Robles tenía una conexión en el corazón que pasaba sangre de un ventrículo a otro cuando no tenía que ocurrir. Ahora se recupera en su domicilio de la operación y del ictus y aunque se fatiga con facilidad y siente vértigo al levantarse, los médicos y él mismo confirman que no tiene ninguna secuela del accidente que tuvo. Robles puede andar y hablar perfectamente y es cuestión de tiempo para que coja la forma física necesaria para volver a ponerse delante de la cara de los toros.